La volatilidad del dólar durante 2022 ha sacudido las finanzas del negocio agrícola, con consecuencias mixtas para el sector. Para algunas empresas, especialmente en áreas donde una parte significativa de los ingresos se recibe en dólares y la mayoría de los costos están en pesos, como es el caso de la industria frutícola, la tendencia ha sido positiva.
Rodrigo Donoso, socio de la consultora Agrocapital, argumenta que el aumento del dólar obedece a varias razones. En primer lugar, hay un componente especulativo; además, la fortaleza externa del dólar juega un papel importante. Otro factor es el desarrollo de la guerra en Ucrania, y finalmente, la inflación global, que en el caso de Estados Unidos se encuentra en torno al 8% anual.
