Las finanzas agrícolas enfrentan una presión significativa en 2024. Las colocaciones bancarias en el sector frutícola llevan cinco años estancadas, y aunque se espera una baja en la tasa de interés, las empresas deben profesionalizarse para atraer capital y mejorar sus exportaciones. La pandemia y la guerra en Ucrania han afectado la rentabilidad de los productores, generando reestructuraciones y un aumento en los costos. Aunque los precios de los fertilizantes han disminuido, otros costos, como la mano de obra, siguen en alza, complicando aún más la situación financiera.
Revista Del Campo. Enero 22, 2024